lunes, 2 de julio de 2012

Aún así, todo lo que quiero hacer es correr y ser libre

Yo sólo quiero volver el tiempo atrás y detenerlo en el día en el que te conocí, así volveríamos a vivir todo lo bonito que nos ocurrió y yo estaría preparada para cuando tuvieras que partir. Pero eso es imposible.

Tú te marchas sin mirar atrás y me dejas con un proyecto de corazón que ya nunca llegará a serlo y las manos vacías de amor.

domingo, 22 de abril de 2012

Tal como eres

Porque ya sé que siempre voy con prisa, pero quiero que sepas que yo por ti sería capaz de parar mi vida. Sería capaz de romper mi reloj de arena y hacerte una playa sólo para las dos. Sería capaz de ir de excursión a buscar horas y días debajo de las piedras, si son para gastarlas estando a tu lado.



Sería capaz de vender mi sonrisa para comprarte un trocito de felicidad y comérmelo contigo. Sería capaz de atar las nubes con lazos de colores y enviarlas a la China, para que no vuelvan nunca más y tus ojos sean más bonitos con los reflejos del sol.



Yo, por ti, amenazaría a tus lágrimas hasta secarte los ojos. Podría hablar con los ángeles y concederte una hora más con él. Incluso sería capaz de hacerte dos alas preciosas y ayudarte a volar y dejar todo lo malo atrás.



Sería capaz de hacer cualquier cosa por ti, sólo tienes que pedirla porque, en ese mismo momento, yo atravesaré el mundo para llegar a ti y concederte el deseo.

viernes, 20 de enero de 2012

Perhaps

Quizás me gustaría volver a  aquel caluroso verano, quizás enero no sea mi mes preferido y quizás tampoco me gusten los lunes. Es más, reconozco que los odio.
Quizás tampoco me guste pasear sola, ni las tardes de manta en el sofá y mucho menos, sacar los pies de la cama cuando el frío vigila atento, esperando morderte el dedo gordo a la primera oportunidad.

Quizás ya no soy la misma, quizás odie ver tu foto cada mañana, sabiendo que no volverás. Quizás algún día aprenda a ser valiente y consiga romperla en mil pedazos.
Quizás me de asco la palabra “adiós” en mi boca, quizás algún día no tenga que volver a pronunciarla.

Quizás no aguante los días de lluvia, quizás me duela la idea de no volver a mirar ese lunar en forma de luna que te descubrí hace tiempo.
Quizás todo era verdad y tus palabras eran sinceras.

Quizás, a pesar de todo esto, todavía me queden motivos para sonreír. Porque hoy, quizás, el mundo no me pesa toneladas.