Cóctel de sentimientos

Miradas inquietas que se escapan nerviosas de las comisuras de tus ojos y van a parar a los míos.
Sonrisas que se clavan en el hueco derecho del miocardio, donde aún cicatriza aquella herida que, en su día, dolía a gritar.

Sonidos de besos que esta vez se posan en unos labios que no son los míos.
Recuerdos de tiempos felices que echan a volar y se ocultan tras las nubes, mientras yo intento desesperadamente batir mis alas para rescatarlos.

Risas huecas, vacías de alegría y faltas de entusiasmo, que se escapan entre mis dientes para intentar fingir que todo sigue igual que antes.
Suspiro que se evaporan y colman el ambiente de humedad triste y pegajosa.

Latidos incompletos y sin ritmo de mi corazón, que ya no van dedicados a ti.
Secretos que se gritan en silencio, que se agolpan contra mi lengua esperando salir.

Verdades a medias que se adornan con grandes mentiras y crean una historia absurda sin explicación.
Y todo lo demás que tú y yo sabemos que pasa desde que mis ojos son grises, en vez de azules.

Te echaré de menos

Y en un instante, lo ves todo claro. La verdad se presenta ante tus ojos y ya no te quedan fuerzas para cerrarlos. Así que lo ves.
Lo ves y escuchas un gran estruendo, el que hacen dos mundos al separarse. En ese momento lo notas, la dsitancia se ríe de ti y se te clava en el lóbulo frontal del cerebro.
Una sonrisa de ella ya no puede curar la herida, ya no puede cerrar la brecha. Cualquiera diría que todo sigue igual que siempre, pero nada es lo mismo porque ya no está.
Su ausencia duele, pero lo que más daño hace es su mirada fría, su falsa felicidad que te recuerda a tiempos mejores.
Tiempos en los que el verbo vivir no era una obligación y nadie me tenía que enseñar a volver a sonreír.
Menos mal que aún conservo las fotos, ellas me recuerdan que aquel mundo perfecto un día fue real.

I'm a superwoman

Porque, en un instante, es como ese momento en que el columpio se balancea y te encuentras en el punto más alto, rozando las nubes con la punta de la nariz. Ese momento en el que no eres consciente de que no puedes volar, en el que te crees el dueño del mundo, ese momento en el que sientes algo especiial en la boca del estómago.

Entonces, me viene esa sensación y, sin pensar, me lanzo. Me lanzo y digo que sí.
Porque, aunque no me guste nada, sabes que yo siempre acabaré diciendo que sí; aunque sólo sea para volver a disfrutar de tu tierna sonrisa.

Voy a morir de amor

Cuando nací,tras muchos estudios de los médicos, mi madre estuvo semanas llorando y mi padre no volvió a sonreír en todo un mes. Habían recibido la peor de las noticias: su hija estaba enferma. Tenía el corazón débil, demasiado enreversado o algo así dijeron.
Desde aquel momento, tengo necesidades especiales. Todos los días necesito recibir mi cóctel de medicinas:besos por todas partes, abrazos en cualquier lugar, sonrisas que alumbren las noches, miradas de amor penetrantes, caricias de las que borran problemas,canciones bonitas, risas de las que recorren toda la columna y se posan en el hipotálamo...
Normalmente, todo va bien, no existe ningún riesgo. Pero,a veces,los problemas se enredan en la válvula que mi corazón tiene demasiado pequeña y el amor impide el paso de la sangre con fluidez.
Ahora mismo tengo una de mis crisis y, en esta ocasión, no puedo recibir la medicina adecuada. Porque sólo la tienes tú y no soy capaz de pedírtela.

Todas las despedidas duelen

Un fantasma que se evapora, haciéndome cosquillas en la cara y rozándome al pasar.
Un verano efímero que me deja con un sabor dulzón de boca y la tristeza pintada en mi mirada. El mar que me llama a gritos, buscando a su sirena enloquecidamente.
El sol que me hace un gesto de despedida y me promete que volverá.
Esos días tan largos, cómplices de mis planes kamikazes, que desaparecen de repente sin decir nada.
La luna que me contempla tranquila en la noche oscura, rodeada de estrellas brillantes.
Tus labios que dejan de rozar mi piel y se quedan sellados para siempre.
Tus ojos que ya no juegan con los míos y van a parar al suelo o a tus zapatos.
Tus manos que ya no se enredan en mi cintura ni en mi pelo y se limitan a encerrarse en los bolsillos de tus vaqueros desgastados.
Tu sonrisa que ya no lleva mi nombre y que no se deja ver nunca.
Mis lágrimas saladas que han vuelto a pasearse tranquilas por mi cara.
Pero sobre todo, lo que más duele, es ese amor loco de verano que se va para no volver jamás.

Porque, por mucho que intente ocultarlo, las alas de ángel no me las quita nadie. Y tú y yo sabemos que éstas siempre van acompañadas de mi sonrisa de boba.

Hay un momento en tu vida en el que descubres que ya no necesitas las respuestas.

Preguntas tontas

¿Que por qué no puedo dormir por las noches? Porque te extraño tanto que mi corazón no puedo dejar de gritar que te ama, con la inútil esperanza de que, algún día, regresarás con una sonrisa, un ramo de esas flores que tanto me gustan y un beso en los labios.
Porque yo sigo anhelando que esta noche la Luna no se vista de gris.

Adiós

Cada metro que recorría en el coche, alejándome de ti y acercándome a mi casa, me costaba un pedazito de mi corazón y un gran trozo de mi alma.
80000 metros perdiendo partes vitales es demasiado para cualquier persona.

Es la hora

- Hola, disculpa: ¿me podrías guardar el móvil mientras que me doy un baño y avisarme cuando suene la alarma?
* Sí, claro. No te preocupes, tu móvil está en buenas manos.
Se va feliz, los pies no le llegan al suelo y sus ojos han recuperado el brillo que le robó aquel Otoño. Entra en la piscina, no le gusta el frío pero piensa en la sonrisa de aquel chico y la sangre bulle por sus mejillas aportándole calor.

* ¿Perdona? - se acerca al bordillo y se la come con la mirada - Ya es la hora.
- ¿Ya? - se extraña.
Cuando sube las escalerillas, él está allí esperando, con su mano tendida.
* Si te digo que confíes en mí y me acompañes a la playa, ¿lo harás?
No sabe por qué pero asiente con la cabeza, dejándose llevar.
Corren juntos, cogidos de la mano, riendo sin parar y sin dejar de mirarse. Ninguno habla, hasta que el chicho se detiene y le entrega el teléfono.
- Pero... - las palabras se niegan a salir de su boca - pero si todavía no es la hora...
* ¿Cómo que no? - finge preocupación y se acerca a la pantalla del móvil - Aquí ponen las 11 y 12 minutos.
- ¿Y? - espera algo enfadada una buena respuesta.
* Pues que es la hora de dejar atrás todo, es la hora de que olvides aquello que entristece tu mirada, es la hora de que encuentres a alguien que te haga el mundo más bonito, es la hora de que aprendas a ser feliz, es la hora de que le digas al mundo que tú puedes, es la hora de dejarte querer, es la hora de que me mires fijamente mientras yo creo vislumbrar el mar encerrado en tus ojos. - su boca se adhirió a aquellos labios que soltaban palabras bonitas y ya el chico no pudo continuar.

¿Mi deseo?

Que me atrapes entre tus brazos y que creemos un mundo sólo para nosotros; un mundo que no se rompa, en el que las calles están llenas de árboles, la universidad sirva para estudiar el amor, el café no amargue, todos los días me salude el sol por las mañanas y que el cartero convierta las facturas en ositos de gominola.

Pensarás que siempre estoy hablando tonterías, que estoy algo loca, (esto último no te lo niego)pero el otro día te puedo asegurar que pude ver todo esto que te estoy contando. ¿Cuándo? Cuando me besaste con la Luna y el mar como testigos y me prometiste que todo saldría bien si somos valientes.

De nuevo, gracias

Gracias por hacer el mundo más bonito.

¿Lo que más me gusta?

Lo que más me gusta es contemplar la sombra que dibujan mis rizos sobre tu piel desnuda, en esas tardes de primavera en las que las ganas de comerme el mundo se apoderan de mí y el sol acaricia juguetón tu cara.

Mi vestido azul

Sí, ese ceñido con estampado de flores. Mi vestido azul tiene un hilo  rebelde que un día se separó de los demás y cuelga hacia fuera a la vista de todos.
¿Cortarlo? Ni hablar.
¿Cómo iba a cortarlo si, cada vez que lo veo, me acuerdo de aquella noche en la que tú lo descubriste?

Today

Tarde de volar entre cuatro paredes; de superar todos los límites; de sobrepasar el techo; de dejarme llevar por el viento como una pluma; de soltarlo todo de repente sin explicar nada; romper la barrera que he construido para mis sentimientos; de cerrar la puerta con llave a los problemas; de escuchar la mejor canción de todas, mi risa y la tuya juntas; de sentirme bien; de quererte; de ser feliz.
Porque, aunque digan que ese lugar a tres metros sobre el cielo sólo existe en la peli, yo sé que es mentira. Sé que me esperas allí y lo mejor es que yo he conseguido el mapa para llegar.

Ya ni siquiera me consuela pensar que, al menos, estarás contemplando el mismo cielo que yo. Porque allí, donde el reloj se adelanta siete horas, las estrellas se habrán ido a dormir.

Matías

Tu nombre repiquetea aún por cada recoveco de mi cabeza y mil descargas eléctricas recorren todo mi cuerpo, dejándome una agradable sensación de hormigueo.
Te recuerdo a la perfección, tanto que podría construir una fotografía con las imágenes que se cuelan en mi cerebro y con las ganas que tengo de volver a verte.
Tu espalda fibrosa, aprisionada bajo esa camiseta negra, apoyada sobre el muro de aquel sitio que, más tarde, frecuentaría esperando encontrarte.
Tu aire despreocupado anclado en tu sonrisa fresca y natural, horas de sol grabadas en los diminutos bucles de tu cabello y años de vueltas al mundo atrapados por el brillo de tus ojos azules,¿o tal vez eran verdes?
Tus manos cuidadosas sujetando aquel botellín verde ya sin cerveza, tu mirada infinita contemplando la puesta de sol y tus caras graciosas que a acompañaban a mi silencio.
Mis intentos de reprimirme para no correr a atraparte entre mis brazos, mis ojos clavados en tu figura como si fueran dos imanes que se atraen sin remedio, aquellas conversaciones tontas, las ganas de escaparme contigo y el presagio de que aquella tarde me costaría meses olvidarla.

¿Que cuándo fue?

Cuando me cortabas la respiración con cada mirada, cuando no podía dejar de contemplar tus labios, cuando se me formaba un nudo en la garganta al verte triste, cuando me regalabas un guiño de ojos,cuando me cogías de la mano, cuando me abrazabas muy fuerte y yo sonreía como una tonta, cuando pronunciabas mi nombre y parecía que lo estuviese haciendo un ángel, cuando podía ver tu rostro iluminado por una sonrisa a metros de distancia. En ese momento fue en el que me enamoré de ti.

Hands up

Me encantan esos recuerdos que marcan tu vida, aquellos que se pasean por mi cabeza antes de dormirme, aquellos que me sobresaltan en el momento que menos me lo espero, aquellos en los que puedo revivir todas las sensaciones como si estuviese allí otra vez. Puedo sentir tu cuerpo contra el mío, siguiendo el ritmo de la música a la perfección, mirándome con tus ojos juguetones y tu sonrisa pícara, la que me dedicas cuando piensas que todo saldrá bien si somos valientes. Una felicidad intensa me recorría y se apalancaba en mi corazón, la primera vez que dejé de pensar en todo y dejé que mi verdadera yo jugara contigo un rato, la primera vez que nuestro mundo estaba hecho de ladrillos y no de cristal, la primer vez que no pensé que aquello no era lo correcto y me lanzé a hacerlo sin miedo.

I miss you

Si mis ganas de tenerte aquí pudieran hacerte volver de la China; ahora mismo estarías robándome un beso, clavando tus ojos negros en los míos, haciéndome reír alocadamente y susurrándome un “te quiero".

You' ve changed my life

Gracias, gracias y miles de gracias más.
Gracias por enseñarme a buscar la palabra “imposible" en el diccionario, comprarme un rotulador negro en la tienda de la esquina y sentarte conmigo para ver cómo la tacho.
Gracias

13 de junio

Tengo un cóctel de recuerdos, con cierto sabor dulzón, que cada noche se pasea por mi cabeza justo antes de irme a dormir. Puedo sentir el huracán de nervios anclado en la boca del estómago, que me impide respirar con facilidad; puedo volver a escuchar tus risas nerviosas e inquietas, que se escaparon de tus labios para encontrarse conmigo;puedo recordar todo lo que sentí en ese mismo momento;puedo notar cómo mi corazón se vuelve a hinchar de amor y canta de felicidad

Lo más bonito

Ese momento en tu vida en el que te das cuenta de que, si este fuera tu último día en la Tierra, estarías haciendo lo mismo que ahora.

Manías tontas

Porque sí, porque ella tiene esa manía. Necesita tener en cada bolsillo del pantalón algún que otro caramelo que le endulce el día, necesita regalarle una sonrisa cada mañana al quiosquero de la esquina,necesita andar por la calle contemplando las nubes, necesita creer en el amor, necesita trabajar por la paz, necesita ser sincera y natural, necesita mirarse en el espejo y creer que se considera bella, necesita volar a tu lado y hacerte cosquillas con su risa, necesita cogerte la mano muy fuerte para tener la seguridad de que no te marcharás,necesita responder a la frase “ buenos días " con un “buenos no, perfectos ". Ella es así, un poco maniática

Sunshine

Notar el frío de las baldosas del suelo bajo mis pies y no sentir que voy a morir, andar todo el día descalza y respirar la tranquilidad que inunda el aire que se pasea por mi habitación.
Pensar en ti, contar los días que quedan para verte, darle la vuelta al tiempo y estrujarle hasta el último segundo que me debe.
Reír mientras me contempla el sol, acariciar tu piel recorriendo cada esquina de tu cuerpo, perderme en tu boca sin querer encontrarme, deslumbrarme con tu sonrisa y empaparme de amor.
Porque, aunque a veces duele, me encanta cuando me muerdes el corazón.

Miedo

Miedo. Miedo del de verdad. Miedo al mañana,miedo a que el sol no pueda entrar en mi cielo nublado. Miedo a que te vayas para siempre, miedo a quedarme inmóvil mientras contemplo cómo te alejas. Pánico a mí misma, a que no haya nadie que me controle cuando yo no soy capaz de hacerlo, pánico a destruir mi vida y todo lo que la rodea.Miedo a involucrarme demasiado, miedo a sufrir y a amar. Miedo a que me digas la frase “todo va a salir bien ” , miedo a creerte.

You

Me encantan tus cálidos abrazos escondidos tras cualquier excusa; tus besos que acarician mi piel,que se funden con ella; tus manos inquietas que buscan a las mías bajo la mesa; tu sonrisa, amiga de mis ojos; tus grandes ojos negros, que saben leer entre líneas; tu corazón enorme que no deja de sorprenderme.

The same

La misma alegría que cuando encontré mis zapatos rosa de princesa en ese baúl viejo, la misma alegría que cuando miro a tus ojos, la misma alegría que cuando el viento balancea mi cabello sin despeinarlo, la misma alegría que cuando saboreo el primer helado del verano, la misma alegría que cuando escucho tu voz al otro lado del teléfono, la misma alegría que cuando te veo sonreír al mismo tiempo que amanece un nuevo día, la misma.

Summertime

No puedo esperar a saborear tus besos salados entre la espuma del mar, a contemplar cómo los rayos del sol juegan con tus ojos azules, a memorizar tu cuerpo detalle a detalle, a inventarnos formas de nubes, a que me abraces muy fuerte para que no me pueda ir, a que fabriques una muralla contra mis malos pensamientos.

Everything is beautiful

- No me hace falta ninguna foto para recordarte, tengo tus ojos grabados a fuego en mi cerebro.
+ Eso tuvo que doler
- No, fue lo más bonito que me pasó en la vida

Butterfly

Puedo sentirte, sé que estás conmigo.
Daría todo aquello que puedas imaginar por que leyeras esto y se te dibujara esa sonrisa que tanto me gusta en la cara. Sigo sin poder perdonarte por haberte marchado tan pronto, pero me reconforta que me sigas, vaya donde vaya. Me hace feliz que poses tu mano en mi hombro y me guíes delicadamente por el camino correcto, aquel que tú hubieras escogido.

En muchas ocasiones he girado mi cabeza con ilusión, esperando encontrarte detrás de mí, al escuchar un aleteo que me roza la nuca. No quiero que pienses que no puedo verte, me encanta contemplarte cuando me visitas en el momento que menos me espero. No hace falte que yo diga nada, tienes esa capacidad para saber cuando te necesito. Tienes esa capacidad de sacarle una sonrisa a aquellos que ya no lo queda ninguna que dar. Gracias por cambiarme la vida, gracias por todo.

You can say I'm a dreamer

Lista de cosas por las que merece la pena vivir:

1. Notar cómo se precipita el aire de mis pulmones en un grito, cuando me haces cosquillas por sorpresa.
2. Cantar para recordar buenos momentos.
3. El contacto con aquellos que me traen de vuelta al mundo.
4. Dar un abrazo de verdad; de los que sientes el calor del corazón de la otra persona latiendo junto al tuyo, filtrándose por tu piel.
5. Acurrucarme en el brasero cuando el frío te muerde juguetón el lóbulo de la oreja.
6. Notar el leve cosquilleo de unos labios en mi mejilla.
7. Sentir la necesidad de refugiasrme en los brazos de esa persona especial y hacerlo sin reparos.
8. Reír a carcajadas hasta notar que tengo que coger aire; hacerlo y seguir con tranquilidad.
9. Pensar que soy capaz de luchar contra la muerte (aunque sepa que no es verdad).
10. Sentir el alivio que recorre mi cuerpo tras solucionar un problema.
11. Ver cómo los días se te escapan entre los dedos como lo hace el agua cristalina.
12. Soñar, soñar al dormir y sentirlo todo tan real.
13. Reírme contigo, parar en una sonrisa, mirar el brillo de tus ojos y sentirme plenamente feliz.